martes, 25 de noviembre de 2008

Taracea, el arte de la incrustación y de la geometría

Decir Taracea es sinónimo de incrustación.
La técnica proviene desde los orígenes de la humanidad cuando de manera precaria se hacían hendiduras en la madera para luego
rellenarlas con otras maderas, metales, piedras, o simplemente hueso y marfil. Con la llegada del Islam a Oriente la Taracea se llenó de simbolismo y belleza que elevó la técnica que ya se realizaba en los pueblos Árabes. Fiel reflejo de ello son los monumentales tesoros de arte que quedaron como legado de aquellas culturas maravillosas como las Mezquitas, los palacios, las "Madrasas" o escuelas coránicas y todo lo referente al arte Islámico. El Islam logra una gran expansión y su cultura se extiende por numerosas regiones y países que anexan a sus propias culturas el arte Islámico.


Cuando decimos Taracea, debe entenderse que se trata de incrustaciones de cualquier clase de material sobre cualquier otra clase de material, pero cuando decimos Taracea tradicional, nos referimos a una línea de realización bien definida así como también lo es el resultado final que el observador puede captar.

Debe respetarse siempre el diseño geométrico coherente, esto es, las estrellas de 6, 8, 12 y 16 puntas, los octógonos y hexágonos, las grecas o guardas de finas tiras de madera que forman interminables rectas que se entrecruzan dando ese aspecto de "unicidad".

La taracea desarrollada en España por la influencia de los musulmanes, los que utilizando marfil, hueso y carey, además de maderas preciosas, con diferentes tonalidades de color, formando dibujos de estructura geométrica para decorar pequeños objetos de uso, como arcas y cofres. La técnica de la taracea fue muy utilizada en la decoración de los bargueños de los siglos XVI y XVII.


El esplendor del oficio de la taracea se alcanzó en la Granada del XVIII aunque tuvo su origen como oficio en la Córdoba del siglo XII. Los artesanos granadinos de la taracea se inspiraron para sus tracerías geométricas en los motivos ornamentales de La Alhambra, continuando este influjo musulmán hasta el día de hoy.

A pesar de la tendencia a la industrialización y la sustitución de materiales por imitación, los talleres más destacados continúan con el empleo de maderas empleadas calificadas como preciosas, importadas por lo general, contándose entre ellas el palosanto, el ébano o la caoba, además de utilizarse cedro, nogal, palo de rosa, naranjo o sicómoro. También se utiliza el hueso y el metal.

La producción de los talleres más cualificados y artísticos se centra, especialmente, en objetos corno bargueños, cofres, estuches, ajedreces, mesas y arcas, utilizando siempre materiales nobles y técnicas tradicionales.

Otros términos relacionados con taracea son marquesina y tesselation.


Un artesano rosarino fiel a la técnica depurada, lo podemos visitar aquí http://www.artemaderataracea.com/index.htm

Taracea, un arte en peligro de extinción


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Celeste, muchas gracias por citar mi pàgina y por difundir y valorar mi trabajo.Soy Alberto, el artesano rosarino.

Celestacha dijo...

Gracias a vos Marcelo, por mantener vivo este arte con mayúsculas !!!

Related Posts with Thumbnails