Me enamoré de un cuadro, amigo Efrit. Me enamoré de un cuadro y de las manos y del alma que lo crearon y desearía que ese hombre no hubiera muerto y presentarme así, muy descarada en su casa e invitarlo cordialmente a que me embadurne con sus óleos bermellones y naranjas y susurrarle que vacíe todos sus pomos de rojo cadmio sobre mi pecho y mi ombligo y los esparza tan hábilmente como él quiera con sus dos palmas fuertes y curtidas por líquidos creadores y tomarle sus manos y ayudarlo con el énfasis perfecto hasta sujetarlo por su espalda y provocar una gran confusión alquímica de pigmentos, piel y sudor...
Después, mientras me penetra y asfixia sabiamente y yo recuerdo su cuadro, morir intoxicada.
Clara María Berduc / Ojos de perra verde
La niña de la cornisa
Hace 7 años
3 comentarios:
:) Compartimos el amor
huhauu!! me encanto ese escrito.De quién es??
y las pinturas de Klimt fántasticas por sus colores!!
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